De la austeridad republicana a la obediencia y pobreza franciscana (La castidad nos la saltamos)
Han pasado ya tres años y medio de la llegada a la presidencia del grupo político llamado Morena. Huelga decir que yo mismo ayudé a constituirlo en diversos espacios y por ello, como muchos mexicanos me invadió un sentimiento de esperanza aquel domingo 1 de julio de 2018. Pensaba inocentemente que por fin ser haría justicia ante tantas atrocidades y malquerencias de nuestro pueblo. En aquel día y aún hasta hace algún tiempo mantenía yo esa esperanza. Pero como he señalado, han pasado ya tres años y medio, es hora de bajar de la ilusión y de la arenga y exponer los datos duros y estos datos arrojan realidades que muchos de mis compañeros de izquierda se niegan a ver, y mucho menos están dispuestos a analizar. Citemos algunos de estos hechos: · 3750 víctimas de feminicidio tan sólo en lo que va de este año. · Hemos rebasado los cien mil desparecidos. · 52,000 cuerpos sin identificar · Disminución del presupuesto de entidades como la CNDH