Buenas contestas.
Hace tiempo que no disfrutaba de una contesta (así decía mi abuela, con lo cual se significaba, plática o diálogo) tan amena como la de la mañana del día de ayer: Me visitó en esta humilde casa Alfredo Zepeda. Conversamos sobre la filosofía materialista de Gustavo Bueno, sobre Cervantes y el Quijote, sobre Sor Juana y Juan Rulfo (quien fue su paisano). Abordamos ideas al respecto de las ideologías posmodernas que sustentan obligaciones forzosas, y que de no hacerlo, corres el riesgo de ser quemado en la hoguera de las redes sociales. Pasamos por el expectante dilema de la Sierra de Huayacocotla, con el multiuniverso nahua, otomí, tepehua, mestizo, así como (al parecer) triste futuro de la UBBJ y la persecución política. Discutimos sobre el protestantismo y la idea de libertad de conciencia en Lutero; derivó aquello sobre algunas referencias del texto “ Páginas para la Historia de Sinaloa y Sonora. Triunfos de Nuestra Santa Fe entre gentes las más bárbaras y fieras del Nuevo Orbe por