Los que andamos entre los cuarenta y cincuenta años de vida, lejos estamos de haber vivido el proceso revolucionario que se conmemora el 20 de noviembre, pero sabemos, eso sí, las historias de nuestros abuelos al respecto y muchos de nosotros nos hemos acercado a fuentes antiguas, (periódicos, fotografías, documentos) y fuentes recientes, (libros, artículos) que narran el proceso. Grandes personajes pasan por la mente, desde Madero, hasta Zapata. Personajes que la Historia oficial o la historia de masas no dejan morir. Hay en cambio otros, que han sido paulatinamente olvidados, y que se asoman por el rabillo de la Historia, hombres de carne y hueso y no como aquellos que de tanto nombrarlos se han vuelto borrosos, odiados o amados, pero dichos sentimientos, pasan por el tamiz de los litros de tinta que han escurrido sobre ellos. Los otros, los de “carne y hueso” son más humildes, sus nombres no aparecen más que en la lista de raya de una hacienda, o en la lista de la leva. Pe...
Antrop. Alejandro Durán Ortega Abrimos una nueva sección para todos ustedes, se trata de la revisión del Archivo Histórico de Carbonero Jacales. Dicho Archivo fue rescatado hace algunos años por un servidor y un grupo de alumnos a mi cargo, provenientes de la Escuela Nacional de Antropología. Pasaron algunos años hasta que una maestra de la misma Escuela se hizo cargo de la estabilización y ordenamiento de éste. Fotografía: Alejandro Durán Ortega. Vista del cielo desde Carbonero Ahora, queriendo transmitir la importancia de este tipo de documentos, y fomentar entre los pobladores de las diversas comunidades el celo por el cuidado y conservación de sus archivos, nos damos a la tarea de exponer algunos de los documentos más importantes del Archivo Histórico de Carbonero Jacales, (en adelante, AHCJ). Comenzamos con uno de los documentos más antiguo que posee el AHCJ, Se trata de un Libro de Actas que fue entregado a las autoridades del ejido el 5 de octubre...
Entre los cuentos de Francisco Rojas del libro “El diosero” aparece “la cabra en dos patas” maravilloso relato donde Juá Shota (indio otomí), recibe una oferta monetaria por su hija. La hija, llamada María Agrícola, fue nacida en lugar agreste y una vez crecida dedicaba sus días a cuidar chivas y poseía como toda criatura, belleza propia. “Sus carnes cobrizas asomaban por entre los guiñapos que vestía, la cara chata hacia marco a los ojos de cervatilla y su cuerpo elástico combinaba líneas graciosas con rotundeces prietas.” (Rojas, 2005:86) En el relato, María Agrícola se convierte en objeto de deseo de cierto ingeniero minero que llegó a instalarse (con todo y esposa blanca y de ojo verde) frente al hogar de Juá Shota. La tierra mexicana actual se parece en gran medida a María Agrícola, deseada por empresas de distinta índole, sobre todo mineras. María Luisa Albores González, secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales, informó que durante el periodo neoliberal, alrededor...
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