Si Zapata viviera….contra la minería canadiense estuviera.

 

Manuscrito Original 
Plan de Ayala

El próximo 28 de noviembre se cumplen 110 años de que Zapata junto con Otilio Montaño y otros zapatistas más firmó el Plan de Ayala. Es obligado al correr del tiempo, reflexionar al respecto. Zapata de quien se ha escrito mucho y se ha comprendido poco, se ha vuelto una bandera para muchos de los pueblos y comunidades de este país y aun fuera de él, su figura ha sido calumniada y ha sido venerada, pero más allá de este cuestión que sucede a todos los históricos, es de destacar que el revolucionario tenía metida entre ceja y oreja la cuestión de la tenencia de la tierra. La tierra, mis queridos amigos y amigas sigue siendo el meollo del asunto. Zapata y los zapatistas dijeron al respecto en el artículo 7º del Plan de Ayala:

7.°. En virtud de que la inmensa mayoría de los pueblos y ciudadanos mexicanos no son más dueños que del terreno que pisan sufriendo los horrores de la miseria sin poder mejorar en nada su condición social ni poder dedicarse a la industria o a la agricultura por estar monopolizados en unas cuantas manos las tierras, montes y aguas, por esta causa se expropiarán, previa indemnización de la tercera parte de esos monopolios a los poderosos propietarios de ellas, a fin de que los pueblos y ciudadanos de México obtengan ejidos, colonias, fundos legales para pueblos, o campos de sembradura o de labor, y se mejore en todo y para todo la falta de prosperidad y bienestar de los mexicanos

¡Vaya, vaya!, ¿cómo andaremos a más de cien años de estas fuertes palabras? Hagamos un breve repaso. Y no, no se trata de una cuestión nacionalista trasnochada, porque quisiera creer que nadie a estas alturas anda gritando ¡mexicanos al grito de guerra!; se trata más bien de una cuestión más profunda, se presenta la cuestión sobre las posibilidades reales de acceso a todos los mexicanos a la riqueza generada por la tierra.

El primer párrafo zapatista dice. “la inmensa mayoría de los pueblos y ciudadanos mexicanos no son más dueños que del terreno que pisan”; es curioso que aunque en la actualidad en el imaginario colectivo los mexicanos somos dueños de nuestro territorio en realidad resulta que más de la mitad de este, está concesionado a mineras.

Alejandro Armenta, presidente de la Comisión de Hacienda en el Senado de la República, denunció que se han entregado 130 millones de hectáreas (de las 150 millones que conforman el territorio nacional) a empresas mineras a través de 65 mil 535 concesiones, de las cuales el 70 por ciento se encuentra en manos de extranjeros; así como 519 mil 178 concesiones de agua a particulares, lo que se ha convertido en un saqueo del líquido para negocios. https://www.milenio.com/politica/70-ciento-concesiones-mineras-extranjeros-senador

Bueno pues, no nos alarmemos, porque ¿de qué otra manera podemos generar riqueza? Tenemos que dar las gracias a esos extranjeros sobre todo canadienses que nos hacen favor de sacar nuestros minerales porque seguramente México se lleva una tajada de todo ello.

De acuerdo con datos de la Camimex, en 2010 la participación extranjera en la minería era de 70%, dejando solamente 30% de participación nacional. De esta cifra, Canadá participa con el 74%, USA con el 15% y China con el 8.3%. Tan sólo como ejemplo, de las 10 minas de oro más grandes en México, siete están concesionadas a empresas de origen canadiense: Goldcorp, Agnico Eagle, Alamos Gold, New Gold, Yamana Gold y Torex Gold Resources, con la mayor producción de oro en la mina Peñasquito, con 411,000 onzas de producción. Fuente: https://www.mexicosocial.org/riqueza-concedida/

Bueno, bueno no todo está mal, aunque hay un 70% de capital extranjero en todo esto, todavía nos queda el 30% a los mexicanos. ¿A los mexicanos?

Respecto al capital mexicano, alrededor del 30% del mercado minero se encuentra distribuido entre 10 empresas nacionales, de las cuales destacan:

• Grupo Frisco (Familia Slim):

• Grupo México (Familia Larrea):

• Grupo Peñoles (Familia Bailleres):

Fuente: https://www.mexicosocial.org/riqueza-concedida/

Es decir solo tres familias mexicanas controlan la minería de casi todo el país, aquí recuerdo la famosa frase chilanga cuando se habla de un abusivo: “mire usted a Don Vergas”. Si estas tres familias son la totalidad de México resulta que sí, el país tiene el 30% de participación en la minería.

Está bien, está bien, pero esas tres familias crean empleos y desarrollo económico para los mexicanos, cosa que siempre se agradece, pues nos reparten la riqueza, por lo que ya no aplica la segunda parte de ese primer párrafo zapatista de que los mexicanos están “sufriendo los horrores de la miseria sin poder mejorar en nada su condición social ni poder dedicarse a la industria o a la agricultura por estar monopolizados en unas cuantas manos las tierras, montes y aguas,[…]”

El informe global de riqueza del banco Credit Suisse, encontró que las personas más ricas de México suman el 1% de la población, y en ellos se concentra el 31% de la riqueza total del país en 2020.

Revelaron que en el año 2000, ese 1% tenía el 42.8% de la riqueza, es decir, en la última década disminuyó la concentración.

Por su parte, la Organización de las Naciones Unidas (ONU), por medio del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), señaló que México es el segundo país de América Latina, en el que los ricos concentran la mayor cantidad de ingresos nacional https://www.dineroenimagen.com/economia/mexico-entre-los-10-paises-que-concentran-el-60-de-la-riqueza-del-mundo/139112?fbclid=IwAR3wbIQ7VT3z2QAJs8DxM33LwKOMDtSm_HbtUVlEKvw5wq2UFzo9o73gN4Q

Caramba señores zapatistas, estamos en las mismas, carambas cosas, valdría la pena recordar entonces que el párrafo firmado el 28 de noviembre de 1911 sigue vigente y que a su letra dice:

por esta causa se expropiarán, previa indemnización de la tercera parte de esos monopolios a los poderosos propietarios de ellas, a fin de que los pueblos y ciudadanos de México obtengan ejidos, colonias, fundos legales para pueblos, o campos de sembradura o de labor, y se mejore en todo y para todo la falta de prosperidad y bienestar de los mexicanos

Podríamos agregar además que:

8.° Los hacendados, científicos o caciques que se opongan directa o indirectamente al presente Plan, se nacionalizarán sus bienes y las dos terceras partes que a ellos les correspondan, se destinarán para indemnizaciones de guerra, pensiones de viudas y huérfanos de las víctimas que sucumban en la lucha por presente Plan.

Así pues, si Zapata viviera… bueno, ustedes saben que sigue.

Sin más, pobre de mi México de la fantasía.

Alejandro Durán Ortega