Bienvenido Andrés Manuel

Curiosa cosa que el día de mañana en menos de cuatro años, aparezca Andrés Manuel por tercera vez en Huayacocotla (la primera vez como candidato y la segunda como Presidente). Ya vemos camionetas blancas de aquí para allá y de allá para acá. Miembros del Ejército Mexicano se mueven de un lado a otro, helicópteros merodean la zona. Los políticos locales preparan sus galas para verse como Dios manda. Nada nuevo en todo ello. El día de mañana muy por seguro se hablará de que los recursos están asegurados para enfrentar los daños del Huracán,  de los millones destinados para ello;  del buen trabajo de Cuitláhuac, de un censo que se realizó “casa por casa”; de la 4T, y de los “adversarios”. Por supuesto, no podrá faltar alguna referencia al dos de octubre, (aunque luego a los estudiantes ni se les oiga) Habrá aplausos y tal vez algunos quejosos que serán minimizados.

Mientras todo ello ocurre don Jacinto y doña Herminia, a quien nadie censó, tendrán que ir viendo como le hacen para el otro año, ante la falta de maíz; como quiera, ya decidieron mandar a su hijo a Monterrey para que desde allá les ayude. Rubén por su parte, ya le puso unas lonas al techo de su casa que rompió el aire. Así podrá al fin dormir y mañana verá a que intermediario le vende, casi regala, su poco de chile chipotle. Por su lado, don Juan, quien acaparó bastante grano, seguirá vendiendo el cuartillo a 40 o 60 pesos, o si alguien se apendeja, un poco más caro, además él estará tranquilo porque a él sí le salió el apoyo por el huracán.  Y así pues, pasado mañana seguiremos trabajando para poder vivir y ser, y al fin y al cabo se acerca el xantolo y allá en nuestros muertos tenemos esperanza.

Bienvenido pues Andrés Manuel.

Alejandro Durán Ortega