Sobre el salario mínimo y los disgustos ocasionados.
La cúpula empresarial, no anda nada contenta, ya en el 2020 el gobierno de Andrés Manuel había subido el salario mínimo a 123.22 pesos, y ahora propone para el 2021 un aumento a 141.70 pesos. La respuesta no se ha dejado esperar. Los mejores defensores de la “democracia” y del libre mercado gritan que este aumento es un riesgo, aducen que no se debió plantear, y por supuesto recurren a la vieja confiable; el fantasma de la inflación. ¿Sabrán estos amigos que los que nacimos en los años setentas en adelante, no hemos conocido otra cosa que no sea inflación?
Dos elementos se les escapan de las manos; el primero la COPARMEX; (Confederación Patronal de la República Mexicana) y la CCE (Consejo Coordinador Empresarial) no representan los intereses de la totalidad de los micro y pequeños empresarios, quienes por otro lado, son los responsables de la creación de la mayoría de empleos en México. ¿Cuántos de ustedes conocen a algún pequeño empresario que sea parte de una de estas dos organizaciones?
Es un hecho conocido que la
economía mexicana, en cuanto al número de empleos generados está basada en las
micro y medianas empresas como ya hemos señalado, pero lo más importante y lo
que casi siempre se olvida es que el trabajador es el que genera riqueza. Es
decir, es sobre la base del esfuerzo del trabajador que los empresarios generan
capital (luego al recordar este hecho evidente y claro, te llaman marxista,
comunista, socialista, y demás adjetivos, que como demostraron los de FRENA,
los usan, pero no los entienden).
Segundo elemento que saben pero
no lo evidencian, porque el juego es político y no económico: un trabajador con
más dinero en mano, se vuelve un consumidor, luego entonces ellos salen
beneficiados, el mercado y consumo interno se fortalecen. Reglas claras
muchachos, reglas claras y chocolate espeso. No me queda más que decir,
que aquel grito que ocupaba años atrás en
las marchas “Salario mínimo al Presidente, pa´ que vea lo que siente”,
podríamos cambiarlo en este momento por “Ganancias tope al macroempresario,
para que nos deje comer diario. “
Alejandro Durán Ortega
También se les olvida muy fácilmente a esos "grandes empresarios capitalistas" que muchos de ellos (la mayoría) no han hecho sus fortunas en un mercado libre ni mucho menos a base de esfuerzo, sino, más bien, a base de contubernios, robos al herario públicos, explotación de trabajadores, especulación, etc. Es decir, se han apegado muy poco a las reglas del mercado o a buena parte de esas teorías rimbombantes que presumen de conocer los economistas.
ResponderEliminarHay un texto genial para entender eso, México en su remolino. Sería bueno revisarlo nuevamente.
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